miércoles, 18 de mayo de 2016

El último día










Patricia Arroyo Gismeros
Grupo 161 Magisterio en Educación Infantil
Universidad Autónoma de Madrid






Ha llegado el final de curso, en un abrir y cerrar de ojos, y en estos 3 minutos quiero expresar lo que he aprendido en esta asignatura. He aprendido que a todos y cada uno de nosotros, por mucho que seamos completamente diferentes, al final nos unen las emociones. Todos sentimos miedo, tristeza, rabia, ... aunque sea en diferentes situaciones o, incluso, en la misma.
Esta es la asignatura donde más emociones hemos puesto en juego, y yo creo que, justo por esa razón, es la asignatura en la que he sentido al grupo completo mucho más unido.
Y es que da igual si eres Bruja o Blancanieves porque, al final, todo el mundo sonríe en el mismo idioma.
Le doy las gracias a todos por haberse abierto y haber mostrado sentimientos delante de todos y sin vergüenza alguna, sobre todo el día que salisteis a hablar sobre vuestras vivencias y experiencias más íntimas, aquel día me cambió la forma de pensar, aquel día llegasteis a mi yo más profundo y lo rompisteis para convertirme en lo que soy hoy. Gracias familia, de todo corazón. Jamás olvidaré todo lo que hemos formado entre todxs nosotrxs.

Para finalizar, me gustaría compartir la letra de una canción que, para mí, es un perfecto resumen del año que he vivido desde que aprobara en abril de 2015 el examen de acceso a la universidad para mayores de 25 hasta el día de hoy, donde termino mi primer año como universitaria con la sensación de haber elegido bien mi camino, algo que no es muy común.

Los instrumentos soplaban lamentos. Caperucita, entre la paciencia y el nervio avanzaba. La castañera pelaba boniatos y un olor a carbón invadía las calles que sigilosamente andaba. Cantaban los pájaros su despedida, Otoño había llegado y con él la melancolía del Verano. 
La gente bajaba a los túneles envueltos por Viento, que subía corriendo escaleras perseguido por Metro, que cada tres minutos vaciaba los andenes. Y así, la familia Metro al completo, transportaba a la gente del hogar al trabajo y del trabajo al calor del hogar, continuamente. 
Recuerdo andaba tras Pasado y Presente, su hermana Melancolía caminaba, dulce y amarga. Pasado tras Presente eternamente y Futuro al frente, misterioso y enigmático, siempre con permiso de Tiempo, sinónimo de cambios y soplaban vientos. 
Por fin llegó Primavera y los niños amapola, la música triste se llenó de color y la ciudad entera salió a las calles a saludar a Sol. Los días se alargaron y con ellos perdió el sentido esta canción, gris y desencantada.
Hasta el próximo Invierno hermanos y hermanas.

"Letargo" - Facto Delafé y las Flores Azules

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